Dedicable
Podría darte tres vueltas si me diera la gana, lo que quieres de mí
Que no te tiemblen las piernas cuando saque las garras, lo que temes de mí
Que no te llenes de miedo si me quito la máscara
Si de repente una noche me levanto a tu hermana...
Que no te tiemblen las piernas cuando saque las garras, lo que temes de mí
Que no te llenes de miedo si me quito la máscara
Si de repente una noche me levanto a tu hermana...
Comentarios
Lei tu post anterior, lo entiendo, que te puedo decir, yo no quiero sufrir mas tampoco ni apoyarme por que eso significa a la larga dolor, lo cierto es que mi corazon no aguanta mucho mas.
Nos leemos.
Un amigo mío, y eventual "novio virtual", me ha propuesto lo siguiente: "Conozcamos juntos a Verónica Orozco (quien canta) y le decimos que eres mi hermanita". La verdad es que me ha parecido una muestra de amor muy valiosa, jajajaja... Pero claro, él quiere que le "dejemos ver". Ay, las conversaciones que suceden a veces...
Respecto al anterior post... Creo que el secreto es cuidar bien la amistad y valorarla sobre cualquier sentimiento de más o cualquier provocación instintiva. Amistad es la clave. Los amigos de verdad no fallan y si alguno falla, o se le perdona o se le olvida. ¿Total? Ya estamos grandecitos y hemos aprendido a tolerar esta clase de decepciones desde que estábamos en el colegio.
Pero amistad. Es un amor bonito, que no desgasta, sino más bien enriquece a cada paso. Sólo amistad...
Todo lo demás, si no queremos sufrir, es mejor descartarlo. Nada de medias tintas, nada de "cariñitos" eventuales. Yo no quiero obligarme a hacer cosas que me duele, además, tengo miedo de querer a una pareja, así que, como comprenderás, mi prioridad es hacer limpieza interna y dejarme de sobresaltos.
Mi corazón ya colapsó hace rato, la verdad, y sé que ahora soy otra clase de mujer, con prioridades muy distantes de lo que, biológica y sentimentalmente, alguna vez quise ser.
¡Un abrazo!
Richard Chavez
www.richardchavez.blogspot.com