Pfffff... En fin.
Hoy un guatemalteco “bien” me preguntó si acaso era posible que los extranjeros generásemos una real empatía con los problemas de su país. Empecé respondiendo que era esa una buena pregunta. Se burló un buen rato. Según él, aquello significaba: “No te sé responder”. Cuando me dejó hablar, entre carcajadas, le dije que la empatía no era cuestión de instituciones, sino de personas.
Luego me contó que los españoles no tenían autoridad moral para pretender cambiar las cosas, después de haber jodido tanto a Latinoamérica. Y que los indígenas no tenían otra opción que aprender a hablar perfectamente el español, eso les abriría las puertas al mundo, a las negociaciones, al desarrollo. Que si el latín era una legua muerta, los derivados de las raíces mayas podían serlo también.
Es latifundista cafetalero. Ha crecido pagando el mínimo vital a sus peones, pero aportando extras de acuerdo a su trabajo, a su rendimiento, a la riqueza que podían generarle. Así son las cosas, bonita, NO PUEDES CAMBIAR EL SISTEMA.
Pero, ¿les has preguntado a ellos qué quieren? ¡No, porque ellos no saben! Vale, ellos no saben. ¿Te das cuenta de que estás actuando como los españoles y extranjeros a los que tanto criticas? “Vienen a imponer un modelo de desarrollo improcedente, sin preguntarnos”, dices. Y tampoco preguntas a los indígenas qué es lo que quieren. “Es que ellos no saben”, insiste.
Me doy cuenta de lo que quiere: la razón. Diplomacia. Bueno, pues, seré diplomática. Entiendo lo que dices, eres un buen empleador (mentira cochina). Pero, ¿y los demás? Tú sostienes que es cuestión de idioma. No me parece el único impedimento. ¿Crees que sólo hablando castellano perfectamente van a salir de la pobreza? No, qué va. Están jodidos por todas partes. Qué bueno, por lo menos lo reconoces. No intento darte lecciones de nada, soy menor que tú, tienes más experiencia. No sé acerca de mis jefes, ni de tantos directores regionales que han pasado, ellos y ellas no son culpa mía. Me interesa crear cierta conciencia entre las personas como tú, tanto como me gustaría conseguirlo en mi país. Y no para que mis peones me guarden lealtad, sino, sencillamente, por justicia.
Sí, es que en el fondo todos somos “buena gente”.
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Actualización 30/12/2010:
Una amiga indígena, maya kaqchikel, a quien conocí en Bilbao (líder, la muchacha), ha comentado al respecto:
En verdad no me sorprende la conversación que tuviste, es una muestra del racismo arraigado en nuestro país, que con el pasar de los años ha ido tomando diferentes matices y líneas. Buscan los medios para justificar las desigualdades e inequidades existentes en nuestros países. Lo que escuchaste es sólo un lado de la modeda, sería bueno que pudieras conversar con personas de otros pueblos de nuestro país, como Mayas, Xincas, Garífunas, verás que tienen otra mirada y otra historia.
Ese pedacido de diálogo te da un panorama de los grandes retos que tenemos que enfrentar los pueblos indígenas, estamos en un sistema que aún no termina de reconocer nuestra existencia en derechos. Sí somos útiles para atraer turismo, pero no cuando demandamos derechos.
Ayer recorrí esta ciudad con algo de profundidad y encontré los vestigios de las dictaduras: intentos burdos de europeización. No es difícil imaginar regímenes empeñados en desaparecer "culturas inferiores", a fuerza de abuso y pistola. Percibo una separación entre: "nosotros, los mestizos casi blancos", y "ellos, los pobrecitos ignorantes". Me es imposible no hacer una comparación superficial con Perú. Aún con todo, tengo un país bastante más integrado, como consecuencia positiva de la emigración a Lima desde el interior, durante las últimas décadas del siglo XX.
Aquí, la tendencia a mantener las clases sociales de antaño es tan fuerte, que resulta ridícula por su nivel de atraso y negación de la realidad. Lamentablemente, una ridiculez que hace muchísimo daño.
Comentarios
Igual tiene problemas para dormir... conciencia le dicen
Aquellas personas que se perciben superiores creen profundamente que la "decencia", la "caridad" y las "buenas costumbres" serán su salvoconducto al Cielo. Con eso se quedan tranquilos y no se ocupan (ni se preocupan) por nada más.
Un besito.
Respecto a esta conversación, he de decirte que yo tampoco le encontré mucho sentido. Supongo que tenía ganas de confrontarse con una extranjera, hacerme sentir "que no sé nada", pero no consideró un pequeño detalle: no soy europea, sino peruana.
Al principio fui respetuosa ("es esa una muy buena pregunta") marcando la distancia entre una foránea y un local. El local siempre sabe más que el de fuera, es una condición ineludible, por ello es importante actuar con prudencia y respeto.
Pero luego, cuando empecé a ver sus contradicciones, ya se me salió la india, en todo el sentido de la palabra.
Me da rabia tanta ignorancia, tanta superioridad. Pensar que tengo tíos "pitucos" que opinan exactamente igual, siempre henchidos de orgullo por ser "buenos cristianos con esa pobre gente"....
Hay mucho de lo que mencionas, y tal parece que es una forma de relacionarse entre seres humanos que perdura en el tiempo. Recuerda que en Bilbao fui una inmigrante "desagradecida" con una buena mujer que "sólo me quería ayudar".
Cuánto daño nos han hecho las religiones.
Pero nunca serán mis iguales, que quede claro.
Todo eso con suspiros y miradas hacia el horizonte. Ay, la condescendencia. Debemos tener cuidado con ella, nunca avisa y a todos nos ha hecho sentir "buenos" alguna vez.
¡Pero que buenos que somos!!!
Pero dime, ¿les has preguntado o es una inferencia tuya?
Sólo por saber.
La corrupción es inherente a los seres humanos, no nos hagamos los tontos. Pero generalizar de este modo es retrógrada, ¿no crees?
Insisto, paternalismo.
Lo chicha es un fenomeno urbano, en el que si bien prima el componente racial andino, ya no podriamos considerarlo indigena en si mismo.
Si nos ceñimos estrictamente a lo chicha, pues si... se dan fenomenos de elegir por elegir, a ultima hora, por el que hace la mejor fiesta o cosas asi, en parte por un total desgano con la politica total... "todos son iguales"...
Sobre como votan los indigenas, ahi ya puedo hablar con menos conocimiento de causa, pero si mencionar que entra mucho en juego los criterios de como se arman las listas, pues de ahi salen tanto vinculados al narcotrafico, como lideresas que han salido desde abajo... es mas complejo