Reconociendo(me)
A ratos me siento invadida por una sensación cálida, similar a la que produce la ternura. Intuyo que se debe a mis circunstancias, he dejado de permanecer en tránsito y empiezo a adherirme a un entorno cargado de certezas, pese a la incertidumbre de apenas llegar.
Hace unos días fui a un mercado bonito, lleno de gente parecida a las personas que he visto a mi lado desde que puedo recordar. Estaba en un barrio antiguo y sencillo, de casas bajas y cuadradas, cristales finos en las ventanas, colores vivos. Se trata de una zona considerada “insegura”. Sin embargo, desde mi arribo no sentí tanta libertad como allí. Quizás las sonrisas devueltas...
Me encuentro en una situación estratégica y a la vez complicada. Estoy aquí avalada por un organismo gubernamental español. Soy sudamericana. Y de clase media baja. Puedo permitirme saber que es más fácil ser asaltado en una zona comercial de nivel elevado, que en un mercado con alta presencia indígena. También entiendo que la prudencia es importante y no deseo pasar por una experiencia de esas en este -bonito- lugar.
Comentarios
Es probablemente la sensación de que uno puede mimetizarse y ser parte del entorno, y no la excepción, lo que hace que nos sintamos mas cómodos (sin olvidar la necesaria prudencia) en un sitio u otro.....
Te mando un beso enorme, estoy muy orgullosa de ti!!!